La paradoja del jarrón. La rueda del futuro.

La economía es una ciencia social. Esto implica que muchos de los supuestos económicos no tienen un razón económica propiamente dicha, si no que aparecen conjuntamente a la conciencia social en la que se engloba.
Eh aquí, unos supuestos hechos por un servidor.


Exacto. Cuando globalmente pensamos que va a ocurrir una cosa, esa cosa sucede. CUando sabemos que ocurre una cosa, esa cosa se agrava.
No es difícil pensar, que teorías clásicas, como por ejemplo de Adam Smith, liberalistas o neoliberalistas, tenían su fundamento, allá por el año 1776, cuando cada uno vivía en su granja particular y sabia del mundo lo mismo que ahora del universo. Poco o nada se sabia de la inflación, la balanza de pagos o el intercambio de divisas. Todo eso sucedía, y las reglas económicas y matemáticas ya existían, de igual forma que la gravedad existió desde que la tierra se formo y seguirá hasta el infinito y mas allá. Sin embargo, que nosotros conozcamos que existe la gravedad no afecta a la gravedad. Y en la economía no sucede lo mismo.

Si cada vez que aprendemos nuevas cosas de la economía estamos aprendiendo cosas nuevas de la sociedad, y la sociedad aprende cosas nuevas de la sociedad, y por tanto la sociedad cambia por que sabe algo mas, cosas que le afectan en mayor o menos medida, ¿No es la economía una posible rueda infinita de la que jamás podremos ver el final?
Por todo ello, opino que los economistas no deben ser simples matemáticos, no deben, ni pueden conocer el futuro económico a largo alcance.
¿Y entonces para que están los economistas?
Para conocer, entender y guiar el mundo económico, en continuo cambio.