sábado, 30 de junio de 2007

Reflexión del curso. Exámenes (1)

Una vez acabado, lo mas lógico es hacer un balance. Un estudio interior sobre lo que ha pasado, lo que he aprendido, y el como debo tomarme el futuro a partir de ahora.
Se podría resumir en un “bien” o un “mal”, pero será un resumen tan estúpido que no tendría cabida.

Cuando pienso en las clases de derecho, las veo lejanas, los cursos cuatrimestrales la verdad es que, para mi gusto, son mucho mejores que las anuales. La única pega, es que acabas del estrés de la evaluación de una y comienzas rápidamente la otra. Estas dando clases de la 2º y aun sigues bajando a recepción a ver si habías aprobado una de la anterior.
Los exámenes, ciertamente no me los esperaba así. Puedo decir con toda tranquilidad que he aprobado 10 de 12 asignaturas, y aunque quizás no deba dar ejemplo, creo que no ha ido tan mal, y me tomo la licencia de opinar sobre ellos.
Hay dos tipos de exámenes. Y se diferencian en dos partes: Lo que tu escribes, y lo que los profesores corrigen.

Un tipo de examen es aquel en el que tienes que pensar. Razonar en el. Una pregunta que no has dado en clase, y en la cual tienes que razonar sobre la marcha, e ir juntando conceptos teóricos de diferentes temas, y practicas de aquí y allá. En definitiva, demostrar que sabes algo realmente y ponerlo en practica, como en la vida, en algo que no puedes esperar. También es cierto que en la corrección, suelen ser mas generosos. Si te equivocas en algo no te decapitan. Y no te ayudan, pero comprenden lo que escribes.

Otro tipo de examen es aquel en el que te ponen los mismo ejercicios que en clase. Exactamente iguales, solo variando los datos, o partes de un tema. Generalmente, en la corrección suelen ir a matar. Si te dejas algo te puedes dar por suspenso.

Sinceramente, y tomando la universidad como lo que es, yo pensaba que serian mas del 1º tipo. De hecho, y gracias mi profesor de física de bachiller que siempre he alabado estoy preparado para eso.
El 2º tipo es algo a lo que todos estamos preparados, es lo fácil en realidad, tanto para los alumnos como para los profesores, pero sinceramente, los profesores que opta por esta vía dan vida a las academias de las que tan mal hablan. Sus exámenes son justo lo que los alumnos de academia han hecho y repetido en ella. Llegan al examen, lo repiten y fin. Mi prioridad es aprobar, aunque lo que de verdad quiero es aprender, me gustaría que estuvieran mas juntas esas dos palabras.

Tengo la suerte de tener unos buenos profesores que han sido duros en los exámenes. Si suspendes un examen duro siempre te queda el consuelo (falso) de que era duro, y si lo has aprobado, la satisfacción es mucho mayor que si el examen hubiera sido sencillo.

1 comentario:

Ajovin dijo...

Recuerda que en la vida te calificarán laboralmente por lo que sepas hacer y por cómo lo hagas y te comportes, por tu propia personalidad ante los problemas y las dificultades.
Si en los exámenes sacaste un 5 o un 8 no lo sabrán, si aprobaste a la primera o a la tercera no lo sabrán.
Nunca preguntamos eso, queremos personas que resuelven problemas y sean eficaces y activos, que sepan trabajar en equipo, tengan iniciativa y capacidad de aprender.